miércoles, 20 de abril de 2022

Paul Gauguin - Museo Nacional Thyssen-Bornemisza



 Colección Carmen Thyssen-Bornemisza Museo Nacional Thyssen-Bornemisza

 

Mata Mua - 1892 (Erase una vez)

Óleo sobre lienzo. 91 x 69 cm

Sala F

En un paisaje idílico cerrado por montañas, varias mujeres adoran a Hina, deidad de la luna. En primer término, una mujer toca la flauta. A la izquierda, separado por un gran tronco de árbol que divide la composición a modo de bisagra, un segundo grupo baila alrededor de la diosa. Gauguin marchó a Tahití en 1891 con el propósito de buscar inspiración artística en los pueblos primitivos, desarrollados al margen de la civilización occidental. Sin embargo, lo que encontró tan sólo eran restos de un pasado glorioso, para entonces en vías de extinción. Mata Mua (Érase una vez) es un canto a la vida originaria que tanto ansiaba encontrar el pintor francés. Pintada en vivos colores planos, al margen de cualquier pretensión naturalista, supone un canto a la edad de oro perdida.

En él se encuentra representado un paisaje de Tahití compuesto por un árbol que ocupa el centro de la composición en la que se puede ver en el primer plano dos mujeres maorís sentadas, una tocando la flauta y la otra escuchando.