lunes, 9 de septiembre de 2019

Henri de Toulouse-Lautrec



Henri Marie Raymond de Toulouse-Lautrec-Montfa (Albi, 24 de noviembre de 1864 - Château Malromé, Saint-André-du-Bois, 9 de septiembre de 1901), conocido simplemente como Toulouse-Lautrec, fue un pintor y cartelista francés, que destacó por la representación de la vida nocturna parisina de finales del siglo XIX.






Toulouse-Lautrec se relacionó, entre otros creadores, con Vincent van Gogh, Pierre Bonnard y Paul Gauguin, y de este último tomó algunos rasgos estilísticos, como el uso de los contornos pronunciados. Pero las obras que más influyeron en su peculiar estilo fueron las de Edgar Degas y las estampas japonesas ukiyo-e. Del grabado japonés tomó la liberación del color de toda función descriptiva, su extensión en amplias superficies y la línea sinuosa, mientras que de los maestros del impresionismo admiraba especialmente la captación de la realidad inmediata.


Hombre muy responsable de su trabajo, Henri de Toulouse-Lautrec acudía puntualmente al taller o al estudio todas las mañanas, lo cual no le impidió llevar una vida disoluta en el ambiente bohemio de Montmartre, donde frecuentó cafés cantantes, teatros, prostíbulos y salas de baile. Estos ambientes constituyen, de hecho, lo más peculiar de su creación artística, en la que las bailarinas de cancán y los personajes de circo son los protagonistas más entrañables.
 En 1899, Toulouse-Lautrec fue internado en una clínica para seguir un tratamiento de desintoxicación etílica. Allí profundizó en el estudio de la luz artificial coloreada y en su estilo expresionista. A esta etapa final pertenece En el Rat mort (1900, Courtauld Institute Galleries, Londres), obra que retrata a Lucy Jourdain, amante de un famoso barón, en el reservado de un restaurante. Las creaciones de esta última época, tras una grave crisis de salud, están imbuidas de tintes sombríos; el artista falleció prematuramente a los treinta y seis años de edad.