jueves, 30 de noviembre de 2017

EXPOSICIÓN HOLOCAUSTO "Auschwitz", un museo del horror nazi de 2.500 metros cuadrados en Madrid



Auschwitz: El horror nazi se convierte en exposición
Madrid acoge el estreno mundial de una muestra que recoge objetos y testimonios de la época
"Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo". La célebre cita de George Santayana abre las puertas del Centro de Exposiciones Arte Canal en los que se concentran la historia y los horrores del campo de concentración nazi más famoso e infame y, también, el más grande
Tan solo el Museo Estatal de Auschwitz-Birkenau, que comprende los campos Auschwitz I y Auschwitz II-Birkenau, declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco en 1979, comprende 191 hectáreas, sin contar el tercero de los campos, Monowitz.
En total, 40 kilómetros cuadrados de la Polonia ocupada, un perímetro en el que se encontraban otros cerca de 50 subcampos y comandos externos donde se explotaba a los prisioneros como esclavos, construidos entre 1942 y 1945 en las inmediaciones de Auschwitz.





Ahora, l a esencia de esa vasta extensión que se empezó a construir en 1940 y en la que fueron asesinadas alrededor de 1.100.000 personas de un total de 1.300.000 deportados, llega a Madrid como único destino español de una exposición internacional que viajará a otras trece ciudades europeas y americanas.
"Esta exposición es una forma de llegar a esas personas que no se pueden permitir hacer un largo viaje para visitar el Museo Estatal de Auschwitz-Birkenau", explica a EFE Piotr M.A. Cywinski, director del museo polaco, y resalta la importancia de este proyecto "ahora que está creciendo el antisemitismo, la xenofobia y el neonazismo".
Propone este recorrido, creado por Musealia en colaboración con el Museo Estatal y otra veintena de instituciones y colecciones privadas, no solo desde el punto de vista "histórico", sino desde el "ético": "Es mucho más que hechos y datos, habla sobre la ética y la moralidad de nuestra sociedad".
Así, 'Auschwitz. No hace mucho. No muy lejos' c omienza en la intemperie, con un vagón original de los que el régimen de Adolf Hitler utilizó de 1940 a 1945 para transportar a judíos, romaníes, prisioneros de guerra soviéticos y homosexuales.
Durante las deportaciones a Auschwitz se llegaba a hacinar a 80 personas en cada vagón, en una superficie de apenas 20 metros cuadrados. Los trenes regresaban sin seres humanos, pero cargados con sus posesiones.
Es, precisamente, uno de esos objetos los que abre la muestra: un zapato de mujer rojo muy simbólico por su elegancia, ya que da cuenta de que su propietaria no sabía dónde iba a ser trasladada porque, de haber sido consciente, no habría llevado un calzado tan refinado, explican desde la organización de la exposición.
"La muestra empieza con el zapato porque queríamos representar la dignidad humana de la víctima. En Auschwitz tenemos más de 110.000 zapatos, pero, si se ven en una masa, no representan la humanidad única de cada uno de los propietarios de esos zapatos, que tienen una historia y una vida que contar", comenta Cywinski.

Por ello, en este recorrido se recogen testimonios de supervivientes de Auschwitz y objetos de las personas que pasaron por su infierno.
Una cuna de bebé, una manta empleada en la Marcha de la Muerte desde Auschwitz, una maleta, uniformes, gafas, latas de leche condensada y correspondencia de los prisioneros comparten espacio con un barracón de Monowitz o una litera de tres alturas.
Y, en contraposición, vestimenta de miembros de la SS de Auschwitz, un juego de mesa antisemita Juden Raus, una lata de gas Zyklon B o un reproducción a escala real de la puerta usada en las cámaras de gas de los crematorios 2, 3, 4 y 5 del campo.
Auschwitz', que se podrá visitar en Madrid hasta el 17 de junio de 2018, cierra su emotivo recorrido a través de 25 secciones -dedicadas algunas, también, al contexto histórico anterior a la Segunda Guerra Mundial-, con un poema de 1971 de la escritora francesa Charlotte Delbo, superviviente del campo, adonde fue enviada por ser miembro de la Resistencia.
"Tú que pasas por aquí/ a ti te ruego/ que hagas algo/ que aprendas un paso de baile/ algo que te dé el derecho/ de estar vestido con tu piel y tu vello/ aprende a caminar y a reír/ porque no tendría sentido/ a la postre/ porque son muchos los que han muerto/ mientras tú sigues vivo/ y no haces nada con tu vida".
………..
EXPOSICIÓN HOLOCAUSTO
"Auschwitz", un museo del horror nazi de 2.500 metros cuadrados en Madrid
Más de 600 objetos originales, en su mayoría procedentes del Museo Estatal de Auschwitz-Birkenau, muestran la historia de este campo de concentración en el estreno mundial en Madrid de la exposición "Auschwitz. No hace mucho. No muy lejos", que acoge el Centro de Expociciones Arte Canal. EFE



ALCOHOL Cask 121, el whisky de 1943 más exclusivo del mundo a 33.500 euros la botella

Yamazaki Sherry Cask: el mejor whisky del mundo
Blade Runner 2049: Johnnie Walker crea una botella especial para la película

La colección privada Glenlivet 1943, Cask 121, es un malta sin comparación, elaborado en una fecha muy importante de la historia, la segunda Guerra Mundial.

Glenlivet pone a la venta 40 botellas de un whisky de 1943, destiladas en plena Guerra Mundial. Cada ejemplar está valorado en 33.500 euros.
Corría el año 1943 y la Segunda Guerra Mundial golpeaba con fiereza el continente europeo. El 14 de enero tuvo lugar un acontecimiento crucial para el devenir del conflicto: la conferencia de Casablanca, en la que se juntaron Winston Churchill, Franklin D. Roosevelt, Charles De Gaulle y Dwight D. Eisenhower para poner orden en la estrategia aliada. Pues ese mismo día, la destilería de Gordon & Mac Phail destiló su apreciado Cask 121.


Gordon & Mac Phail destiló su preciado Cask 121 en 1943 y ahora ese mismo whisky está valorado cada ejemplar en 33.500 euros.
Como afirma Stephen Rankin, miembro de la familia fundadora y director de Glenlivet, "Este hermoso whisky ha sido alimentado y cuidado por cuatro generaciones de nuestra familia y nos da un enorme placer, al fin, sacar a la luz este único y raro malta".

Hay que situarse en el contexto. La guerra había reducido la producción de whisky en Escocia, de hecho muchas destilería del lugar fueron cerradas tras el mes de octubre de 1942. Incluso, la de Glenlivet paró la producción en la primavera de 1943... Así que a finales de los 40 y principios de los 50, los barriles disponibles eran extremadamente limitados y, claro, muy demandados. Glenlivet reabrió, menos mal... "Gordon & MacPhail han estado en el negocio del whisky por más de 122 años, traspasando su sabiduría a las siguientes generaciones. Creo que la colección privada Glenlivet 1943 es un malta sin comparación, elaborado en una fecha muy importante de la historia en un mundo que se encontraba en pleno conflicto bélico. Este whisky proporciona a la gente el placer de saborear una pieza clave de la historia líquida de Escocia", confiesa Rankin.
Tan solo se van a poner a la venta 40 botellas adornadas con grabados de oro que reflejan los alrededores de las tierras que circundan la destilería y embutidas, cada una, en una caja de madera hecha a mano. Además, se acompaña de un libro conmemorativo escrito por el experto en whiskys Jonny McCormmick. Eso sí, para hacerse con uno de estos tesoros, hay que ir hasta Elgin,
en donde se encuentran los cuarteles generales de Glenlivet... y pagar 33.500 euros. Bueno, es una agradable oportunidad para conocer Escocia.



Tan sólo se pondrán a la venta 40 botellas adornadas con grabados de oro, cada una en una caja de madera hecha a mano.