Decenas de
científicos en diversas partes del mundo siguen de cerca la evolución de la
gran grieta que se expande por la plataforma de hielo Larsen C, en la península
antártica. A principios de febrero, la Agencia Espacial Europea difundió las
imágenes captadas con ayuda de los satélites Sentinel-1 y esta semana es la
British Antarctic Survey (BAS) quien facilita nuevas e interesantes fotografías
y vídeos recogidos desde aviones que han sobrevolado esta gran fractura en el
hielo.
En ambos
casos, los expertos indican que la grieta se está ampliando a ritmo acelerado
desde finales de 2016 meses y que es muy probable que alcance el extremo de la
plataforma -provocando la fractura total- en los próximos meses.
Los cálculos
actuales indican que la rotura de esta masa de hielo podría crear un iceberg de
más de 5.000 kilómetros cuadrados. Para tener una idea aproximada de esta
dimensión se debe recordar que la isla de Mallorca tiene una superficie de
3.640 km2.
Entre los
equipos que estudian este fenómeno se encuentran también el proyecto MIDAS,
liderado por la Universidad de Swansea (Reino Unido), que miden desde hace años
las dimensiones de esta fractura.
Terreno
inestable
Durante el
presente verano antártico, un equipo de investigación de glaciología del
proyecto MIDAS ha estado en Larsen C usando técnicas sísmicas para examinar el
fondo marino bajo la plataforma de hielo. La inestabilidad de la zona impidió
establecimiento de una base fija pero los científicos pudieron recoger datos
sobre el terreno e imágenes aéreas de gran calidad.
La rotura de
las plataformas de hielo en la Antártica y la formación de grandes icebergs es
un fenómeno relativamente frecuente y no existen datos concretos que relacionen
directamente el proceso que ahora se estudia con el cambio climático.
No obstante,
los expertos consideran demostrado que el cambio climático está teniendo un
efecto significativo en el debilitamiento y la reducción del grosor de las
plataformas de hielo de la Antártida